Adherencia y sostenibilidad. Sonia Gallastegui Ruiz de Eguino
Sonia Gallastegui Ruiz de Eguino
Máster MSL
Ante el gran reto que representa para los próximos años la sostenibilidad de nuestro sistema sanitario y ante la urgencia de cambios innovadores que necesita el mismo,me gustaría dedicar unas líneas a un factor clave como es la adherencia a los tratamientos para asegurar esta sostenibilidad.
La OMS la define como el cumplimiento del tratamiento a tomar la medicación prescrita y a la persistencia, es decir,hacerlo a lo largo del tiempo.
La falta de adherencia se relacióna directamente con un empeoramiento de la salud, enfermedad, rehospitalizaciones,
morbilidad y mortalidad, con unas repercusiones socioeconómicas enormes y con elevados costos para el sistema. En Europa se traducen en 125.000 millones de euros y 200.000 muertes prematuras anuales, en concreto, en España provoca un gasto total de 11.500 millones de euros al año (informe Antares 2013)
El envejecimiento de la población, las enfermedades crónicas y el aumento constante de pacientes pluripatologicos y polimedicados son factores que agravan este problema dada la relación inversa que existe entre dosis prescritas y adherencia. En pacientes crónicos la falta de adherencia es del 50%, del 75% en pacientes psiquiátricos,70% en pacientes asmáticos y del 50% en pacientes con hipertensión, diabetes y colesterol. De hecho, existen enfermedades frecuentes donde esta falta de adherencia conlleva graves consecuencias como son las enfermedades cardiovasculares, oncológicas, diabetes, EPOC, trasplantes o VIH por ejemplo.
Las causas de una mala adherencia son variadas van desde efectos adversos a la medicación, complejidad de tratamientos, edad avanzada, nivel cultural bajo e incluso elevado coste de la medicación.
Estamos por tanto ante un problema de salud de primera magnitud donde el abordaje del mismo ha de ser multidisciplinar.
Es necesario simplificar los tratamientos, seleccionar la terapia mejor tolerada, evaluar las causas de la falta de adherencia e intervenir, garantizar una continuidad asistencial coordinada, estrategias de información y educación (donde jugarían un papel importante el sector de enfermería y también las asociaciones de pacientes), en resumen, un paciente que entiende su patología y su tratamiento es mas proactivo y mas adherente.
Un claro ejemplo de intervención, estrategia y de resolver la complejidad de los tratamientos de pacientes crónicos es la desarrollada por Ferrer en colaboración con el CNIC (colaboración Publico-privada) sacando al mercado la primera polipyll cv, con los 3 componentes básicos que todo paciente en prevención secundaria cardiovascular ha de tomar según guías nacionales e internacionales. Estudios recientes han demostrado que solo con el aumento de la cumplimentación terapéutica que se deriva de su uso se pueden evitar en 10 años entre 48-58 muertes y eventos cardiovasculares no mortales por cada 1000 pacientes tratados. Claro ejemplo de futuro, que apoya la sostenibilidad del sistema sanitario gracias a la mejora de la adherencia y a su costo-efectividad. Creo que deberían de aplicarse incentivos por parte de la administración para potenciar su uso,incluyéndola además en los diferentes protocolos y guías de las líneas asistenciales.
El paciente se sitúa en el centro del sistema sanitario siendo el principal motor y autor de la gestión de su enfermedad, ayudado por supuesto por todos los profesionales de la salud implicados.
Las nuevas tecnologías, dispositivos novedosos de dispensación de medicamentos, y el uso de la m-Health (pieza clave), abren un canal nuevo de comunicación entre paciente-profesional sanitario e industria farmacéutica. Serán necesarias las colaboraciones entre industria y compañías tecnológicas que deberán garantizar que el contenido de estas apps este basado en la evidencia y actualizado por profesionales externos.
Desde hace unos años se están estableciendo poco a poco en nuestro país “planes integrales de adherencia” en algunas comunidades pero aun queda un largo camino por recorrer y donde mejorar e innovar.