Talento Run: experiencia Rocío Ramos Medina
A finales de 2016 empecé a correr. Las motivaciones que me llevaron a dar este primer paso fueron las comunes (mantener la forma y desconectar). Tras superar los primeros meses en los que correr era una obligación empecé a disfrutar de las sensaciones que me aportaba. La sensación de libertad que experimento cuando me calzo un par de zapatillas, hace que deje de pensar y todo a mi alrededor empiece a fluir.
Esto me llevó a inscribirme en mi primera carrera de 10km. Los miedos que me acechaban en los días previos desaparecieron en la línea de salida cuando iba cruzando miradas con el resto de participantes y sentí que sin conocernos todos éramos cómplices y que juntos superaríamos todas las dificultades que se presentaran durante el recorrido.
A esta primera carrera se fueron sumando muchas más hasta que en marzo del 2020 motivado por el COVID-19 nos privaron del mejor momento de la semana: madrugar un domingo y salir a conquistar la ciudad. Por eso cuando desde TALENTO RUN nos ofrecieron la oportunidad de participar en la carrera Madrid Corre por Madrid y la carrera de la Mujer no lo dudé en ningún momento y decidí participar. El formato era diferente pero las ganas las mismas. Aunque esta vez no estaba acompañada del resto de participantes, el sentir que formaba parte del equipo TALENTO RUN me dio la motivación necesaria para alcanzar una nueva meta.
Espero que pronto esta experiencia sea más enriquecedora cuando todos los miembros de TALENTO RUN podamos disfrutar juntos de ella.
Me gustaría destacar que iniciativas de este tipo hacen que la escuela te aporte además de una formación académica un desarrollo integral de la persona incluyendo el deporte como una herramienta para aprender a enfrentarte a los retos o adversidades que puedan surgir en el día a día.
Gracias escuela Talento seguiremos sumando kilómetros juntos.