6 desafíos a corto plazo. Sonia Pulido Sánchez
SONIA PULIDO SÁNCHEZ
ALUMNA MBA MADRID
Desde hace años, el sector farmacéutico se desarrolla dentro de un entorno muy dinámico y cambiante. Recientemente, se ha tenido que enfrentar a situaciones imposibles de prever incluso por los mejores profesionales, circunstancias sin referentes, como fue el caso de los medicamentos para la hepatitis C: las asociaciones de pacientes ejercieron tal presión social que lograron que el acceso a estos fármacos fuera casi total. En esta ocasión, las compañías detrás de estos fármacos salieron bien paradas, pero no siempre es así.
Es por ello que predecir los retos a los que se enfrentará la industria farmacéutica a 5 años vista, no es tarea fácil. Sin embargo, procederé a explicar los que, en mi opinión, son los desafíos más importantes que tendrá que afrontar a corto plazo:
- Posibilidad de la entrada en el mercado farmacéutico del gigante Amazon. Si bien es cierto que a día de hoy este evento es poco probable en países como España, donde la venta de medicamentos con receta por internet está prohibida y queda reservada a las oficinas de farmacia, hay otros países como EEUU en los que esta práctica es diferente y Amazon podría estar pensando introducirse como plataforma distribuidora.
- Presiones de las autoridades sanitarias para ajustar al máximo los precios de los medicamentos. Se prevé que el presupuesto público para sanidad se mantenga estable y no aumente, al menos no cuantiosamente, en los próximos años. Esto, acompañado del aumento en la esperanza de vida de la población y la cronificación de enfermedades, va a suponer, como ya lleva haciéndolo un tiempo, que las administraciones públicas exijan a las compañías farmacéuticas grandes rebajas en el precio de los medicamentos, lo que disminuirá enormemente los beneficios.
- Transformación hacia un sistema en el que el paciente participa en la toma de decisiones. El “nuevo” Real Decreto 1090/2015 que regula los ensayos clínicos en España establece por primera vez la obligatoriedad de incluir a un miembro representante de los intereses de los pacientes en los Comités de Ética de la Investigación con medicamentos (CEIm), organismo que emite un dictamen favorable o desfavorable para la realización de ensayos clínicos y estudios observacionales en España. Este y otros factores dejan claro que permanecer cerca de los pacientes será una de las claves para saber responder más rápidamente a sus demandas e inquietudes.
- Descubrimiento de nuevos fármacos. Aunque parezca muy obvio, este es uno de los mayores retos a los que se está enfrentando ya la industria. Como comentó muy acertadamente uno de los ponentes de nuestro MBA, Luciano Conde, “easy targets are gone”. La realidad es que actualmente cuesta más, desde todos los puntos de vista imaginables, hallar un nuevo fármaco eficaz y seguro, que éste sea aprobado por las autoridades competentes y finalmente poder sacarlo al mercado.
- Integración de herramientas digitales que optimicen los procesos actuales: desde una mejor búsqueda de moléculas verdaderamente activas y seguras para evitar que se desechen en etapas avanzadas de investigación, pasando por el desarrollo de programas informáticos con los algoritmos adecuados para el diagnóstico temprano, hasta el análisis de grandes cantidades de datos para su traducción en conclusiones útiles en la toma de decisiones estratégicas.
- Transparencia en los hallazgos en investigación para evitar duplicidades innecesarias y por tanto, gastos prescindibles para lograr la mayor eficiencia del sistema.
Por último, me gustaría dedicar un espacio para destacar la importancia de la inversión en investigación para la búsqueda de antibióticos eficaces. La resistencia a antibióticos es ya una amenaza real. Se estima que si no se toman medidas, en 2050 causará 10 millones de muertes al año en el mundo, superando a las muertes por cáncer, ya que ni las operaciones más sencillas podrán llevarse a cabo, debido al riesgo de infección. Sabemos que el mercado de las enfermedades bacterianas es poco rentable, por la dificultad para encontrar nuevas moléculas activas, el reducido tiempo de tratamiento comparado con enfermedades crónicas y la gran velocidad de aparición de resistencias a los antibióticos que desarrollan las bacterias. Sin embargo, es importante que el sector farmacéutico y ahora también nosotros, como integrantes del mismo, tomemos conciencia de este problema y pongamos las medidas para solucionarlo.